La aventura de leer

Hace poco he experimentado algo que un par de años atrás me parecía inalcanzable: he firmado algunos ejemplares (no muchos, que era un martes de cielo plomizo) de la antología Poesía bonita y que se entiende, en la caseta de la editorial {Pie de página} de la Feria del Libro de Madrid. Para todo haySigue leyendo «La aventura de leer»

Xocoatl se dice chocolate

Esta época nuestra tan rendida a simplificaciones, a historietas de buenos y malos, suele enjuiciar complejísimos hechos con sumarísimas sentencias ante las que no se admiten apelaciones ni se aportan otras pruebas que las inculpatorias. Así, un evento tan descomunal como el descubrimiento de América se despacha con un adjetivo tan elocuente como “genocida”, queSigue leyendo «Xocoatl se dice chocolate»

Sevilla tiene una plaza especial

No será porque no estuviéramos avisados. Venecia, el monte Saint-Michel, la Acrópolis, las playas de Boracay… enclaves atestados de móviles a la caza del penúltimo selfie. No aludo a los turistas, que estos son apéndices irrelevantes de los smartphones que los dominan, que los obligan por imperativo social a registrar el tiktok definitivo. Lo queSigue leyendo «Sevilla tiene una plaza especial»

La memorieta

“La mejor inversión que existe es la que se hace en educación”. Sé que la frase, que han pronunciado miles antes que yo, suena a anuncio de detergente, pero la digo y la repito con una convicción absoluta; no con Fe, que ésta prescinde de la evidencia, sino con la creencia fundada en los hechos.Sigue leyendo «La memorieta»

Edadismo o Yayofobia

Originario, posiblemente, de algún reducto animal de nuestro cerebro, tenemos un instinto que el sentido común aún no ha domesticado: el de esos -ismos que crean bandos cuando se presenta ante nosotros alguien “diferente”, y empleo este término, diferente, para referirme, por ejemplo, a un ser humano de otro color o sexo, o uno queSigue leyendo «Edadismo o Yayofobia»

Cuando bailemos

Me considero un patoso. Especialmente, son dos los terrenos donde mi torpeza ha destacado siempre: en el amoroso y en el gimnástico. Lo que no podía figurarme hasta ahora es que el uno y el otro estuviesen tan relacionados. Para los asuntos amorosos, cuento con las excusas propias de mi generación, como la educación enSigue leyendo «Cuando bailemos»

La utilidad de lo inútil

Mi amiga “T” me quiere mucho. Fruto de su insobornable cariño me recomienda que escriba para públicos más amplios, que en mis textos emplee términos más llanos, que evite a mis potenciales lectores esas visitas al diccionario que arriesgan ponerles en fuga. Yo también quiero mucho a “T”. Escucho sus recomendaciones, pero esta en concretoSigue leyendo «La utilidad de lo inútil»

Por gunfias y noemas

Dado lo inusual que resulta en mí recordar lo que sueño, me siento obligado a declarar que hace unos días soñé algo verdaderamente memorable, lo reconozco: estábamos mi amiga “A” y yo en casa de… (te advierto que ni entonces ni ahora había bebido nada) …sí, estábamos en casa de Jeff Bezos, el mandamás deSigue leyendo «Por gunfias y noemas»

Yo suspendí gimnasia

En estos tiempos, que lo privado no escapa de los voraces motores del Big Data y estos de los de la inhumana Inteligencia Artificial, guardar un secreto es tarea imposible; peor aún, es titánica si se trata, además, de controlar la narrativa cuando lo que se ocultó es desvelado. Por eso y por anticiparme aSigue leyendo «Yo suspendí gimnasia»

¿Eres masoquista?

Hace mucho, muchísimo, que tengo una duda acerca del gusto. No del estético, ese sobre el que nada hay escrito (aunque haya mucho que escribir). No. Me refiero al sentido del gusto. Dada mi calidad de disfrutón gastronómico y mi cantidad de sobrepeso, ya debería haberla aclarado, pero, en mi caso, el tiempo no despejaSigue leyendo «¿Eres masoquista?»

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